Muchas veces se nos ocurren grandes ideas y en un afán de mostrar nuestro lado innovador se las contamos a nuestro jefe, quién puede llegar a apropiárselas.
¿Cómo podemos llegar a ver esto de forma positiva? Pensando que somos un equipo y que los logros del jefe se verán reflejados también en nosotros, como en los bonos de desempeño que evalúa él mismo. O también se puede optar por:
- Guardar nuestras mejores ideas hasta que se tenga la oportunidad de mencionarlas cuanto todo el equipo esté reunido.
- Si ya es demasiado tarde, hay que alzar la voz de manera sutil en una reunión.
Finalmente, no hay que preocuparse mucho por ello, ya que sólo pensar en esa situación puede llegar a realmente afectar a una persona. Si tienes grandes ideas, tu jefe ha de pensar que estás haciendo un muy buen trabajo, así como te está evaluando de la manera adecuada, y esos dos factores son lo que ayudarán en tu crecimiento.